Productores de leche checos están en crisis

La dirección de la mayor empresa productora de leche checa, Madeta, procede a la reducción de su producción y estudia la adopción de otras medidas para este año, como consecuencia de los impactos de la recesión económica.

Milan Teplý  (Foto: CTK)
Representantes de la Cámara Agraria checa indican que la situación en la industria láctea nacional es crítica y puede repercutir también en otros sectores de la agricultura. La crisis afecta seriamente a la mayor empresa productora de leche, Madeta. El director general de la compañía, Milan Teplý, señaló que en caso de no conseguir algún tipo de ayuda a la producción por parte del Estado, Madeta se verá en quiebra.

“En el curso de los próximos dos años estaremos obligados a cerrar las dos fábricas lecheras de la empresa. El cierre de la fábrica de la ciudad de Strakonice podría producirse todavía este año”, dijo Teplý.

La reducción de la producción en Madeta afectará también a los agricultores que se dedican a la cría de ganado vacuno. Ya desde hace algunos meses se enfrentan a serias dificultades, debido a los bajos precios del suministro de leche y a la disminución de la demanda.

Los ministros de Agricultura de los países de la Unión Europea acordaron el lunes en Bruselas que concederán ayuda a los productores de leche europeos, ya que varias centrales lecheras de otros países comunitarios también se enfrentan a problemas parecidos a los que tiene Madeta. Según indicó Tereza Dvořáčková, portavoz del Ministerio de Agricultura para la presidencia checa de la Unión Europea, Bruselas promoverá un programa de salvación del sector que será aplicado a partir del 1 de marzo y hasta el mes de agosto.

“Entre los instrumentos a ser utilizados en el marco de ese programa figura la imposición de precios fijos para el suministro de mantequilla y leche desnatada en polvo y la renovación de las subvenciones a la exportación de determinados productos lácteos”, dijo Dvořáčková.

La dirección de la central lechera checa Madeta, espera que esta ayuda de la Comisión Europea pueda ayudar a salvar la producción. Considera que, no obstante, incrementar el rendimiento será complicado debido a que depende en gran medida de la demanda. Encontrar nuevos mercados de venta en el mundo afectado por la crisis financiera y la recesión económica es una tarea sumamente difícil.