Médicos insisten en declararse en huelga a pesar de que el Gobierno les promete más dinero

Ministro de Salud, David Rath (Foto: CTK)

Pese a que el Estado ofrecerá a los hospitales y médicos checos a partir del primero de abril un crecimiento del cinco por ciento en recursos financieros, las asociaciones médicas checas tienen previsto entrar en huelga para fines de febrero y reclaman la dimisión del ministro de Salud, David Rath.

Ministro de Salud,  David Rath  (Foto: CTK)
La nueva enmienda a la respectiva ley supone que el Estado entregará a los establecimientos médicos un dos por ciento más de los recursos financieros en la atención al paciente y un siete por ciento más en medicamentos.

"Supongo que la próxima semana el Gobierno aprobará un aumento de los recursos financieros para el sector de seguros estatales, que ascenderá a cien millones de euros aproximadamente", afirmó este domingo el jefe del Gobierno, Jirí Paroubek.

"Así la suma total crecerá mensualmente en cuatro euros por persona", matizó el ministro de Salud, David Rath. Según dijo el jefe del opositor Partido Cívico Democrático, Mirek Topolánek, el Gobierno socialdemócrata admite de esa forma que en el pasado había cometido un error.

De izquierda: David Rath,  Jiri Paroubek y Milan Kubek  (Foto: CTK)
"El Gobierno así reconoce sus errores cometidos en el sector sanitario. Nosotros llevamos proponiendo una modificación a esta ley desde hace mucho tiempo", subrayó Topolánek.

La nueva medida propuesta por el Gobierno debe calmar la tensa situación que reina en el sector sanitario, no obstante, no logra desistir a los médicos y farmaceúticos de su propósito de entrar en huelga el 24 de febrero. Los líderes de las asociaciones médicas sostienen que el jefe del sector sanitario, David Rath, realiza las reformas de manera poco transparente y que suprimirán la huelga sólo en caso de que dimita.

Por su parte, el presidente de la Cámara de Médicos, Milan Kubek, considera injustificada una huelga bajo tales circunstancias.

"La manifestación no tendrá ningún fondo racional, tratándose de un acto puramente político, ya que la accesibilidad y calidad de la atención médica en la República Checa no está amenazada en absoluto", resaltó Kubek.