La amnistía de Klaus dejó sin responsabilidad penal a miles de personas

Foto: Filip Jandourek

Unas 111.000 personas fueron liberadas de la responsabilidad penal gracias a la amnistía del ex presidente checo, Václav Klaus, de comienzos del año 2013. Así lo indican los últimos datos estadísticos vinculados con ese acto, proporcionados por el Ministerio de Justicia.

Foto: Filip Jandourek
La amnistía declarada por Václav Klaus al final del período de cumplimiento del cargo presidencial en enero pasado, provocó un revuelo en la sociedad por su amplitud. El número de beneficiados fue de 111.000 personas, de las que 20.000 cumplían penas incondicionales en instalaciones penitenciarias del país. La mayoría de los individuos fueron condenados por robos, asaltos, otros por no pagar pensión compensatoria a sus hijos.

Según datos publicados recientemente por el Ministerio de Justicia, la criminalidad en el país aumentó en el 7% durante los primeros diez meses del presente año, en comparación con el mismo período del año pasado, lo que los especialistas relacionan con la amnistía, sostiene Robert Schuster, portavoz del Ministerio de Justicia.

”En cuanto a estos datos, hay que decir que para la fecha del 16 de diciembre más de una tercera parte de las personas que abandonaron las cárceles a comienzos del año, eran investigadas por la Policía. A las cárceles regresaron 988 personas que fueron amnistiadas el 1 de enero de 2013, la mayoría por robos. De ellas, unas 161 personas se encuentran en prisión preventiva y 827 personas ya cumplen la pena”.

Foto: archivo de Radio Praga
Debido a una cláusula especial de la amnistía, fueron cerrados definitivamente también 265 procesos judiciales de delitos económicos, de ellos 18 de alta gravedad, por prolongarse el proceso más de ocho años. El fiscal del Estado, Pavel Zeman, se dirigió al Tribunal Supremo tratando de impedir al menos que sean extinguidos unos 16 procesos con daños económicos millonarios, pero hasta el presente no ha tenido mayor éxito.

Por otro lado, la amnistía permitió ahorrar grandes recursos financieros destinados al funcionamiento de los establecimientos penitenciarios, según afirma Robert Schuster.

”Calculamos que el ahorro financiero neto alcanzó unos tres millones de euros. Estos recursos son aprovechados para la reconstrucción de las celdas y las cocinas en las instalaciones penitenciarias, así como de algunas prisiones en general. O sea que el dinero ahorrado permitió mejorar el nivel del sistema penitenciario en la República Checa”.

Václav Klaus,  foto: Filip Jandourek
Otro aspecto que cabe mencionar es que antes de la amnistía presidencial de comienzos del año 2013, las cárceles en Chequia estaban realmente repletas. En algunos de los casos su superpoblación oscilaba entre el 108% y el 130%. A raíz de la amnistía, su ocupación llega actualmente al 80% en términos generales. Una prisión, que se encontraba en muy malas condiciones técnicas, fue definitivamente cerrada y otras tres fueron desalojadas a raíz de la reducción del número de reclusos. En caso de necesidad, pueden ser reabiertas en forma inmediata, aseguró Schuster.

La opinión pública insiste sin embargo que, fuera de los ahorros alcanzados gracias a la amnistía y que permitieron mejorar el nivel de las prisiones en el país, la decisión del ex presidente checo, Václav Klaus, afectó a la mayoría de los ciudadanos del país. Liberó de la responsabilidad penal a un gran número de personas de las que muchas vuelven a robar, asaltar, a cometer delitos económicos y no cumplen su obligación de pagar la pensión compensatoria a sus hijos.