Falleció la destacada actriz checa, Lída Baarová

Lída Baarová

El pasado 27 de octubre falleció en la ciudad austríaca de Salzburgo una de las estrellas del cine checo de la primera mitad del siglo XX, Lída Baarová, poco después de cumplir 86 años. Con su gran talento y su belleza extraordinaria Baarová conquistó no sólo los corazones del público, sino también el del Ministro de Propaganda de la Alemania hitleriana, el temido Josef Goebbles.

Lída Baarová
Lída Baarová nació el 7 de septiembre de 1914 en Praga. Durante sus estudios en el conservatorio descubrió su gran talento artístico el director de cine Miroslav Josef Krñanský, quien le ofreció un papel en la película "Carrera". Este primer papel fílmico fue para Baarová también su primer éxito que le hizo abandonar los estudios e iniciar el trabajo y su futura gran carrera artística. Lída Baarová era sumamente bella y fotogénica, con una especial magia personal, de manera que pronto llamó la atención de los directores de cine alemanes. En 1937 le fue ofrecido hasta un contrato en Hollywood, pero por razones diversas Baarová no se decidió a dar ese importante paso.

Su gran carrera artística se vio marcada por su relación amorosa con el Ministro de Propaganda y tercer hombre del imperio nazi, Josef Goebbels, quien hasta se mostró dispuesto a renunciar a su alto cargo para poder continuar su relación con Baarová. En el caso tuvo que intervenir en aquel entonces el propio Adlof Hitler, obligando a Goebbels a permanecer en su cargo y a romper su relación amorosa. Desde aquel momento, Baarová se vio bajo la supervisión de la Gestapo, prohibiéndosele trabajar en los estudios cinematográficos alemanes.

Al regresar a Praga, Baarová rodó sus mejores películas checas, entre ellas también "La Muchacha de Azul", por la cual recibió en 1940 el premio Nacional, actuando también en el Teatro Nacional y en el Teatro de Vlasta Burian, de Praga.

Poco antes de finalizar la Segunda Guerra Mundial, Baarová trató de esconderse en Alemania, pero fue detenida y condenada a un año y medio de cárcel por supuesta colaboración con los ocupantes nazis. Bajo circunstancias bastante dramáticas, Baarová logró huir en 1948 a Austria, en compañía de su segundo marido Jan Kopecký, y de allí se trasladó por corto tiempo a Argentina. Después de regresar nuevamente a Europa, Baarová se desempeñó en varias películas italianas, entre ellas en la titulada "Almas sin conciencia" del célebre cineasta, Federico Fellini. Posteriormente actuó también en teatros de Austria y Alemania.

Una enfermedad que en 1948 quebrantó su salud la unió para siempre con su amigo, el médico Kurt Lundwall, con quien contrajo matrimonio, trasladándose de por vida a Salzburgo donde, a causa del corazón, encontró su muerte el viernes pasado.