El "terror rojo" de la antigua Checoslovaquia comunista

Milada Horáková (Foto: CTK)
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Milada Horáková, Závis Kalandra, Oldrich Pelc, Jan Buchal - una mujer y tres hombres fueron ejecutados por el régimen comunista en la antigua Checoslovaquia por supuesta traición a la patria el 27 de junio de 1950 en un proceso escenificado. En la actualidad, este día se convirtió en la República Checa en el Día de la conmemoración de las víctimas del régimen comunista.

Milada Horáková  (Foto: CTK)
"Al aprobar la pena de muerte para Milada Horáková, el Tribunal se basó en las siguientes deliberaciones: Su actuación criminal era la más peligrosa, ya que lideraba el grupo de individuos que desarrollaban actividades antiestatales", así el entonces presidente del Tribunal, Karel Trudák, calificó a la diputada por los socialistas nacionales de ser cabeza de un grupo de 12 supuestos espías, envíandole al cadalso.

El proceso judicial fue puro teatro. El régimen comunista necesitaba demostrar su fuerza y procedimiento severo contra los enemigos del pueblo, copiando los procesos falsos contra la resistencia de la Unión Soviética de los años treinta.

Jan Kalous, de la Oficina de Investigación de los Crímenes Comunistas, explica por qué el entonces régimen decidió acusar precisamente a Milada Horáková como jefa de una aparente conspiración.

Decenas de personas conmemoraron en el cementerio de Vysehrad el 55 aniversario de la ejecución de Milada Horáková  (Foto: CTK)
"Los que inventaron este proceso necesitaban a una persona representativa tanto en el escenario político del país como en el exterior, y Milada Horáková cumplía muy bien estas condiciones".

La diputada se negó a pedir el perdón al entonces presidente Klement Gottwald. En vez de ella lo hicieron su padre e hija, así como varias personalidades con renombre mundial, entre ellos incluso el físico Albert Einstein, pero en vano.

La Asociación checa de Antiguos Presos Políticos conmemoró este domingo en un acto de piedad a todas las víctimas del régimen comunista, fallecidas entre 1948 y 1989. El jefe del Senado, Premysl Sobotka, advirtió en el evento de que los comunistas siguen representando una amenaza para el mundo democrático.

"No se trata sólo de Milada Horáková, sino de todas las personas ejecutadas en aquella época en procesos irracionales. Creo que la nación checa poco a poco se va olvidando de los crímenes cometidos aquí, bajo el régimen comunista, y en la actualidad considera al partido comunista como una formación política estándar", resaltó Sobotka.