El escudo antimisiles europeo se extenderá a Chequia en 2018

Foto: Missile Defense Agency

Tras la cumbre de la OTAN celebrada estos días en Lisboa, el primer ministro checo, Petr Nečas, ha declarado que el país se implicará activamente en el proyecto de escudo antimisiles europeo, como estaba previsto. El sistema empezará a proteger la República Checa a partir de 2018.

La cumbre de la OTAN en Lisboa,  foto: ČTK
El compromiso de la República Checa con la Alianza Noratlántica sigue firme y Praga no solo participará de los gastos del futuro paraguas antimisiles en Europa, sino que también albergará un centro de alerta que formará parte del sistema. Después de la cumbre de la OTAN que ha tenido lugar en Lisboa, y en la que se ha decidido la creación definitiva del escudo, el primer ministro checo, Petr Nečas, ha declarado que el sistema protegerá en primer lugar a los países del sur de Europa, más amenazados. A partir de 2018 se extenderá al norte del continente, incluyendo la República Checa.

En opinión de Nečas, el acuerdo alcanzado entre los miembros de la OTAN y la colaboración de Rusia en el proyecto deberían acallar las voces en contra.

Petr Nečas,  foto: ČTK
“Esto ha confirmado que existe un riesgo militar real, que puede extenderse la capacidad de construir armas de destrucción masiva. Y que es necesario desarrollar sistemas de defensa capaces de reaccionar a este riesgo potencial. Y el plan que estaba preparado hace algunos años se hizo como primer paso, y se preveía que más pronto o más tarde formaría parte de la Alianza”.

Y es que Chequia formó parte del grupo de países europeos dispuestos a apoyar a Estados Unidos en este primer proyecto de barrera antimisiles. La decisión del Gobierno checo despertó las protestas de diferentes sectores de la población, que se negaban al establecimiento en el país de una base militar norteamericana. La oposición socialdemócrata trató de bloquear el proceso aduciendo que tenía lugar fuera del marco de la OTAN.

De hecho, tras la decisión conjunta de este fin de semana, la Socialdemocracia ha anunciado que no se opondrá a la participación checa en el sistema.

Aunque los detalles de la contribución checa todavía no están claros, el ministro de Defensa, Alexandr Vondra, ha adelantado que la construcción de las infraestructuras necesarias en la República Checa correrá a cuenta de los estadounidenses durante los primeros tres años. Aún así está previsto que el país participe de los gastos del proyecto, que se calculan en unos 200 millones de euros.