Descubren fuga de datos del Servicio de Inteligencia

El Servicio de Inteligencia checo, BIS, enfrenta un escándalo. Según informara este lunes el portal Aktuálne.cz, del departamento económico del servicio de contraespionaje civil escaparon datos secretos, que posteriormente se divulgaron entre círculos empresariales.

Varios listados de colaboradores y de operaciones en las que participó el departamento económico del Servicio de Inteligencia se perdieron hace más de dos años. El hecho se puso en evidencia por casualidad hace un par de días durante una acción de los propios agentes del BIS. Estos fueron descubiertos mientras espiaban una reunión del ex jefe del servicio de espionaje civil, Karel Randák, supuestamente para obtener los datos perdidos. Randák se quejó del procedimiento ante su sucesor, Ivo Schwarz, quien informó seguidamente del asunto al gobierno.

El portavoz del Servicio de Inteligencia, Jan Subert, rechazó confirmar o negar la información sobre la fuga de datos.

"Las informaciones de las que dispone el Servicio de Inteligencia están bajo su control. En reacción a las noticias publicadas el director del Servicio solicitó gestionar el asunto con la Comisión Parlamentaria para el Control del BIS".

El jefe de dicha comisión, Jeroným Tejc, del Partido Socialdemócrata, indicó que desea convocar una sesión de la misma lo antes posible.

"Considero este asunto muy preocupante. Si se han desvelado informaciones sobre la red de agentes, es muy grave. De todas maneras hay que verificar esa información".

El Servicio de Inteligencia opera en el territorio checo. El departamento económico del BIS está encargado de proteger los intereses económicos del Estado. Entre otras tareas, controla privatizaciones estratégicas, examina a los interesados en las licitaciones públicas, y observa actividades de los grupos financieros, así como de las empresas que comercializan mercancías sensibles como electricidad y combustibles.