Arranca un estudio del smog y su impacto

Ostrava

El impacto del smog sobre las personas que habitan en las zonas afectadas es el tema de un nuevo estudio de científicos checos.

Ostrava | Foto: František Tichý,  Český rozhlas

El smog afecta seriamente y de forma regular en la temporada invernal varias regiones de la República Checa, sobre todo las del noreste del país. La alerta por smog rige actualmente en Moravia-Silesia, Olomouc y Zlín. A raíz de esta situación, las empresas industriales en algunos distritos de esas regiones, entre ellos las de Ostrava, Karviná y Frýdek-Místek, tuvieron que adoptar medidas de regulación de la producción, a fin de no contaminar más el aire, sostiene la meteoróloga Marie Odstrčilová.

Radim Šrám,  foto: Šárka Ševčíková,  ČRo
”Las fábricas locales emiten partículas de polvo y de otros elementos tóxicos, lo que incrementa el nivel de su concentración en el aire. Por este motivo tuvo que ser declarada la alerta por smog y aplicadas las regulaciones en la industria en las regiones de Moravia-Silesia, Olomouc y Zlín”.

En la mayoría de las estaciones de medición en las regiones mencionadas, la concentración de partículas de polvo en el aire sobrepasa cuatro veces los límites permisibles, que son de 50 microgramos de partículas de polvo en el aire por metro cúbico. En el distrito de Třinec, en el norte de Moravia las concentraciones de polvo sobrepasaron incluso los 200 microgramos por metro cúbico.

La región de Moravia-Silesia figura desde hace varios años entre las regiones de mayor contaminación ambiental a nivel de Europa. Un grupo de científicos de la Facultad de Medicina de la Universidad de Ostrava inició recientemente un estudio centrado en la influencia que tiene el aire contaminado en la salud humana.

En el proyecto participarán unas 8000 personas de las ciudades de Ostrava, Praga, Brno y České Budějovice, para comparar el eventual impacto negativo que tiene en la salud de los habitantes de distintos lugares del país el aire que respiran, señala el garante del proyecto, el académico Radim Šrám, de la Universidad de Ostrava.

Foto ilustrativa: Pixabay CC0
”El 62% de nuestra población está expuesto a una mayor concentración de partículas de polvo en el aire de lo corriente. A raíz de las condiciones climáticas en este país, en verano esta concentración es muy baja, pero en invierno sobrepasa el doble o el triple de los niveles permisibles. Esta situación puede influir negativamente el embarazo, por ejemplo”.

Los científicos estudiarán los problemas respiratorios de los recién nacidos, la fertilidad de las mujeres, la calidad del semen y de los espermatozoides de los policías, los cambios genéticos de las personas que participarán en el proyecto, así como las dolencias más frecuentes de las personas que practican el ‘running’ y suelen correr unos 10 kilómetros a la semana como mínimo.

Como apuntara Radim Šrám, los policías por ejemplo, fueron escogidos para el estudio por tratarse de uno de los mayores grupos de profesionales que suelen pasar toda su jornada laboral en la calle. Por ese motivo respiran durante horas el aire que en algunas zonas suele contener muchos contaminantes.

El proyecto científico está programado para cinco años y será financiado en parte con los fondos europeos. Bruselas decidió destinar para este fin casi 10 millones de euros.