La República Checa atrae a inversionistas de Asia

El esperado ingreso de la República Checa a la Unión Europea atrae a empresarios japoneses y coreanos. A finales del año pasado, las inversiones asiáticas en el país representaron más del 20 por ciento de los ingresos financieros desde el extranjero.

La ausencia de aranceles y la amplitud del mercado que se abrirá ante la República Checa después de su ingreso a la Unión Europea constituyen uno de los principales motivos de interés para las distintas fábricas de automóviles de Asia por ocupar posición en el terreno checo. La participación asiática en este sector industrial representó el año pasado más del 40 por ciento de las inversiones extranjeras.

El director de la corporación Hyundai Motor para Europa Central y del Este, Steve Yang, sostiene que al convertirse la República Checa dentro de dos años en miembro de la Europa comunitaria, las ventajas que se desprenden de esa afiliación serán aprovechadas por todas las empresas residentes en este país.

A los inversionistas les atraen también la estabilidad económica, la mano de obra barata, el alto nivel de la producción industrial y el volumen de las estimulaciones inversionistas.

Por su parte, los empresarios japoneses aprecian el hecho de que la mayoría de los capitales invertidos en la República Checa permanece activa, arrojando ganancias. El único fenómeno que les parece extraño es el alto número de ausencias laborales a causa de enfermedad de los trabajadores. En la actualidad actúan en el país más de 80 empresas niponas.

En lo que se refiere a la indústria de automóviles, la corporación japonesa Toyota Motor, que vendió el año pasado en el país casi cuatro mil vehículos, ha manifestado hasta el momento el mayor interés por el territorio checo. Desde hace dos años, otra coporación nipona también actúa con mucho éxito en la República Checa: se trata de Mitsubishi Electric. En el país desarrolla sus actividades asimismo la corporación coreana Daewoo Motor, y se espera la entrada de Hyundai Motor.

Según el director de la Asociación de Industria Automovilística de la República Checa, Antonín Sípek, es evidente que la creciente actividad de la Toyota japonesa inspira a los coreanos. Toyota Motor y PSA Peugeot Citroen preparan un proyecto común para la construcción de una nueva fábrica en Bohemia Central, que debería empezar a producir automóviles dentro de tres años.

Los proyectos de Toyota y Hyundai estimulan la iniciativa de otras empresas extranjeras para invertir en la República Checa. Es que también los suministradores de las dos entes asiáticas esperan un "boom" tras el ingreso del país a la Unión Europea.

Entre estas empresas figura la sociedad española, Grupo Antolin, que quiere invertir unos 27 millones de dólares en una nueva empresa para la fabricación de piezas complementarias del diseño interior de vehículos.

El mayor productor de automóviles en la República Checa, SKODA AUTO, que con casi 80 mil vehículos vendidos el año pasado encabeza la lista, sostiene que la competición asiática no le produce ninguna preocupación.

"En general, aplaudemos todas las inversiones en la economía checa, en especial las destinadas a la estabilización de la industria de suministradores automovilísticos, cuyo dinámico desarrollo fue inaugurado precisamente por Skoda Auto", afirma su portavoz Milan Smutný.

Autor: Vít Urban
audio