Recuerdan en Brno a las víctimas de la Marcha de la Muerte de 1945

'La Peregrinación de la Reconciliación', foto: ČTK

Hace 71 años, el 30 de mayo de 1945, miles de alemanes fueron obligados a abandonar la ciudad de Brno. La Segunda Guerra Mundial había terminado y unos 25.000 habitantes de habla alemana empezaron la Marcha de la Muerte hacia Austria bajo la amenaza de los fusiles. Unas 300 personas repitieron el fin de semana aquel recorrido en una Peregrinación de Reconciliación.

'La Peregrinación de la Reconciliación',  foto: ČTK
Mujeres, ancianos y niños fueron forzados a caminar sin descanso 32 kilómetros desde la ciudad de Brno hasta el pueblo de Pohořelice. Todos eran habitantes de la metrópoli morava, pero de nacionalidad alemana.

Grupos armados, apuntaban sus fusiles contra civiles hambrientos y sedientos. Habían salido a las diez de la mañana y su primera escala fue hasta el día siguiente en el pueblo de Pohořelice donde había sido improvisado un campo para los que definitivamente no podían continuar la terrible travesía.

Un grupo de habitantes de la ciudad de Brno organiza desde hace 10 años una Peregrinación de la Reconciliación. En esta nueva edición participaron unos 250 checos, alemanes y austríacos, indicó Jaroslav Ostrčilík, uno de los organizadores.

“Este año marchamos en la dirección opuesta. De manera simbólica buscamos recuperar, o bien devolver de cierta manera lo que la ciudad de Brno perdió en el pasado“.

'La Peregrinación de la Reconciliación',  foto: ČTK
La transferencia de los alemanes de los Sudetes, después de finalizada la Segunda Guerra Mundial, es un tema que hasta el presente desata polémica entre algunos grupos de ciudadanos de uno y otro lado de la frontera.

La Peregrinación de la Reconciliación, entre muchas otras actividades, busca cerrar capítulos del pasado, por más duros que sean, con el fin de devolver la confianza entre los vecinos.

Durante la transferencia forzada de los alemanes y austríacos de Chequia se cometieron muchas atrocidades contra la población civil. Mientras que algunos ciudadanos sostienen que se trató de una respuesta adecuada por los crímenes cometidos por los nazis, otros sectores de la población condenan lo ocurrido.

De acuerdo con los historiadores, de las 25.000 personas que iniciaron la Marcha de la Muerte unas 1.700 murieron víctimas del agotamiento y de las pésimas condiciones que reinaban en el campo de Pohořelice, pero el número exacto de fallecidos se desconoce hasta la fecha.

Después del fin de la Guerra Fría y del mundo bipolar, la República Checa y Alemania y Austria se convirtieron en firmes aliados dentro de la OTAN y los tres son miembros de la Unión Europea. A diferencia del pasado son muchos los puntos de coincidencia que les unen, tanto desde el punto de vista económico y comercial, como cultural, científico y de cooperación en general.