Programa especial de Navidad

Belén

Con motivo de la Navidad, en Radio Praga les ofrecemos un programa especial animados por el deseo de compartir con ustedes estas fiestas de paz y amor.

Al igual que en numerosos países, muchas son las tradiciones vinculadas con el día de Navidad en la República Checa. Se suelen preparar platos y dulces típicos de Navidad, y al pie de los árboles navideños se suelen instalar pesebres.

Y es precisamente la hermosa tradición de pesebres en la República Checa el tema de este programa especial de Radio Praga.

Las fiestas de la Navidad son concebidas en la República Checa como fiestas familiares y consideradas las más bellas del año. En los hogares se vive una verdadera tranquilidad y benevolencia, mientras que afuera, detrás de las ventanas, el invierno se deja sentir con toda su fuerza: con nevadas y temperaturas bajo cero.

Según fuentes literarias, en Europa la Navidad comenzó a festejarse en el siglo IV. Estas fiestas cristianas fueron sustituyendo paulatinamente los rituales paganos relacionados con el solsticio de invierno, la expulsión de las fuerzas de la oscuridad y la reaparición de la luz. Y por ello también la aparición de una nueva vida en la naturaleza, lo que a su vez traía alegría y provecho al ser humano.

Debido a que en Bohemia muchas de las tradiciones paganas adquirieron con el tiempo el carácter de costumbres populares -y como tal se han conservado hasta hoy- las fiestas de la Natividad Jesucristo se entrelazaron con diversas costumbres populares. Es así que la forma actual de festejar la Navidad en la República Checa, respeta la costumbre cristiana de instalar Nacimientos y árboles navideños, pero sigue empleando diversos ritos populares como, por ejemplo, el de partir una manzana por la mitad para verificar si habrá felicidad en el hogar, que data del siglo XVII.

Y durante la Navidad nunca faltan los villancicos en la República Checa. Estos empezaron a surgir en la Edad Media y todavía el pueblo checo conserva un sinnúmero de estas canciones populares que evocan la atmósfera festiva de la Pascua de Navidad.

Motivo de Navidad
Ya habíamos comunicado nuestro propósito de familiarizarles, amigos, con la costumbre de instalar belenes en los hogares checos durante las fiestas navideñas.

Los pesebres, que evocan el nacimiento de Jesús, reflejan el motivo principal de la celebración de la Navidad. De manera tierna y sin necesidad de recurrir a palabras, narran la historia de más de dos mil años de antigüedad, la historia de la Natividad de Jesucristo.

La tradición de los pesebres fue iniciada en el Reino de Bohemia por los jesuitas en el siglo XVI. El primer Nacimiento de Europa Central fue instalado en Praga, en la iglesia de San Clemente, en la Ciudad Vieja. Fue fabricado en 1560 por orden de la Compañía de Jesús, que de esta forma clara y simple quería acercarle al pueblo checo la historia de la Natividad de Jesucristo. Pero aquel primer pesebre no se conservó.

La noticia del Nacimiento de Belén se divulgó pronto por todo el Reino de Bohemia y, desde entonces, durante las fiestas de Navidad las iglesias del país instalan bellos pesebres.

Los especialistas consideran que el mayor pesebre de este género conservado en Bohemia, o mejor dicho, del que se ha conservado un fragmento, data de alrededor del año 1670. Se trata de un conjunto de varias figuras de madera de más de un metro de altura, instalado en uno de los nichos posteriores de la iglesia de San Vito, en la ciudad de Kostelec nad Labem, al norte de Praga.

Junto a la cuna con el Niño Jesús hecho de cera, se encuentran la Virgen María y San José, en primer plano vemos arrodillados a ambos lados de la cunita a dos de los Reyes Magos, mientras que al tercero le vemos detrás.

Vale agregar todavía que gracias a los jesuitas, la costumbre de instalar pesebres en las iglesias se divulgó no sólo en Europa, sino también en otros continentes.

Los Nacimientos instalados en las iglesias se hicieron tan populares en el antiguo Reino de Bohemia que pronto pasaron a ser una cuestión de prestigio para las ciudades y poblados del país. Lamentablemente, los esfuerzos por tener el mejor pesebre se fueron convirtiendo con el tiempo en manzana de la discordia e incluso llegaron a desembocar en discrepancias entre los fieles.

De este negativo fenómeno se sirvió José II Habsburgo "a cuyo imperio también pertenecía el reino de Bohemia- y en 1782 emitió una ordenanza de prohibición de instalación de pesebres en las iglesias de toda la monarquía de los Habsburgo. José II consideraba poco digno para la Iglesia que ésta se sirviera de los pesebres para acercarle al pueblo la Natividad de Jesucristo.

Pero ya entonces los nacimientos eran tan populares en Europa y en los territorios de la Corona Checa, que la costumbre de instalar pesebres durante la Navidad no pudo ser erradicada.

Los primeros en instalar nacimientos en sus hogares fueron los representantes de la nobleza. Los pesebres pronto se convirtieron en uno de los mejores regalos obsequiados por la nobleza a sus amistades durante la Navidad, fabricados de diversos materiales y tamaños.

Cuando el barroco, a principios del siglo XVIII surgió en Bohemia Oriental, en las proximidades del palacio de Kuks, el llamado "Belén de Kuks". Fue realizado por orden del conde Frantisek Antonín Spork, dueño del palacio y destacado mecenas de la cultura en Bohemia. El autor del nacimiento, el famoso escultor barroco, Matyas Bernard Braun, lo talló en una roca en un bosque cercano al palacio.

Aunque este Nacimiento se ha conservado en muy mal estado, se trata de una valiosa muestra barroca del arte de los pesebres en Bohemia. A su mantenimiento se dedica ahora gran atención.

Además de los palacios de la nobleza, a mediados del siglo XVIII la costumbre de los belenes comenzó a extenderse también entre el pueblo checo. En dependencia de los recursos financieros de cada familia, y también de la región del país, los pesebres eran fabricados de diversos materiales: madera, paja, cristal, cerámica, mazapán, pan de especias, y en 1790 apareció en Bohemia el primer Belén de cartón.

Pronto este último material se convirtió en uno de los más populares en Bohemia por ser asequible a todas las capas de la población: En el siglo XIX el cartón fue aprovechado para la fabricación de pesebres en serie. En las postrimerías del siglo XIX, los nacimientos de cartón eran un solicitado artículo de exportación.

Durante los dos últimos siglos, los pesebres que se fabricaban en Bohemia fueron adquiriendo un carácter especial que los distingue de los hechos en otros países. Además de la costumbre de emplear diversos materiales para la fabricación, también las figuras del Nacimiento fueron caracterizando las regiones de origen.

Es que las figuras de los belenes solían ser vestidas con los típicos trajes regionales, o representaban a determinadas personalidades históricas de la nación checa. También en los pesebres se solían incluir construcciones que se asemejaban a las obras arquitectónicas de algún pueblo o ciudad del país.

De esta manera, la fabricación de nacimientos en Bohemia llegó a formar parte de las artes plásticas populares. Familias y generaciones enteras practicaron este oficio más bien como entretenimiento al principio, y luego lo convirtieron en su profesión.

Tomando en cuenta la popularidad que en la República Checa tienen los nacimientos, resulta natural que por estas fechas no falten pesebres en la mayoría de los hogares. Además, durante estas fiestas, los checos, sean creyentes o ateos, acostumbran visitar con toda la familia alguna iglesia del país para ver el Portal de Belén instalado en la misma.

Un Nacimiento realmente curioso suele ser instalado todos los años en la iglesia de San Mateo, en Praga. Está hecho de pan de especias, por lo que resulta imposible, amigos, conservarlo infinitamente.

La autora del pesebre de pan de especias es la señora Helena Horálková, de Praga. A esta actividad se dedica desde hace unos 30 años, aunque, según nos confesó, la costumbre de hacer galletas de pan de especias para la Navidad fue pasando de generación a generación en su familia, desde hace mucho tiempo....

La fabricación del Nacimiento de pan de especias requiere no sólo habilidad sino también mucho tiempo, aunque la señora Horálková opina que todo es relativo:

"Depende del tamaño del pesebre. El primer Nacimiento que hice para la iglesia de San Mateo, de Praga, tenía algo más de 20 figuritas, lo que no me dio tanto trabajo. Pero con el paso de los años fui haciendo más y más hasta llegar a unas 300. En las figuras de mi pesebre también he tratado de reflejar siempre la forma de vestir de cada región de Bohemia y Moravia y, como se imaginarán, son muy variadas..."

Pero entonces todos los años hay que hacer más de esas 300 figuritas para el Nacimiento de pan de especias... Ah, qué trabajo!!!

"Si quiero que todas las galletas estén frescas y desprendan el inconfundible aroma del pan de especias, no me queda otro remedio....Aunque tengo que confesar que en los últimos años, por razones de salud, acepté la oferta de impregnar algunas de ellas con un conservante químico. Las demás no lo llevan para que no se pierda el aroma. Pero insisto en que me decidí a aceptar esa oferta por razones de salud, ya que de otra forma estaría dispuesta a seguir haciendo todos los años un nuevo Nacimiento".

La señora Horálková nos contó que para lograr hacer e instalar el pesebre en la iglesia de San Mateo antes de la Navidad, tiene que empezar a preparar las figuritas de pan de especias ya en el mes de octubre. Primero tiene que preparar grandes cantidades de masa, luego recortar las diversas figuras con moldes especiales, hornearlas y, a mediados de noviembre, la señora Horálková comienza a colorear las diferentes figuras con una masa especial de azúcar, clara de huevo y colorantes.

Como podrán imaginar, estimados oyentes, el trabajo no es fácil, aunque podemos confirmar que el resultado es maravilloso... Y para aquellos que intenten hacer algo similar, la señora Horálková ha revelado la receta familiar para el pan de especias:

"La mejor masa es la que se obtiene mezclando partes iguales de harina fina y harina de trigo, para la que necesitamos: 140 gramos de harina fina, la misma cantidad de harina de trigo, 210 gramos de azúcar, 140 gramos de miel de abeja, 2 huevos y las diversas especias que lleva este tipo de masa y que seguro ustedes conocen...Extendemos la masa, recortamos con moldes para galletas, horneamos hasta que las galletas estén doradas y luego de enfriar las figuritas, las coloreamos según la imaginación de cada uno, con clara de huevo." Reconocerán, amigos, que a primera vista todo parece muy fácil. Sólo no olviden que las galletas recién horneadas son bastante duras, y que debemos dejarlas reposar por lo menos una semana para que se ablanden un poco!!!

Pues, ¡buen provecho! Aunque ustedes, amigos, tendrán primero que preparan las galletas de pan de especias según la receta de la señora Horálková, antes de probarlas. Pero este problema no lo tienen algunos niños checos que, al visitar durante la Navidad la iglesia de San Mateo, en Praga, no lograr resistir la tentación y hacen desaparecer algunas figuritas del Nacimiento expuesto, pero nadie les regaña, nos cuenta la señora Horálková.

Además, quién resistiría tal tentación!!! Y estamos en Navidad, fiestas de amor, paz y felicidad, pues que los niños disfruten, ¿verdad?

Otro hermoso Nacimiento suele ser instalado en la iglesia de la Virgen María de los Ángeles, en el barrio Hradcany de Praga. Data de 1780 y sus 43 figuras, de tamaño natural, son de madera. Cada año durante las fiestas de la Navidad un sinnúmero de habitantes y visitantes de Praga dirige sus pasos a Hradcany para ver ese hermoso pesebre.

Pero el Nacimiento más famoso de la República Checa no se encuentra en Praga, sino en el Museo de los Pesebres con sede en la ciudad de Trebechovice pod Orebem, a unos 100 kilómetros al noroeste de la capital checa.

Fue tallado en madera a finales del siglo XIX por el carpintero Josef Probost y sus ayudantes. Su realización tardó 47 años, tiene 7 metros de largo y casi 3 metros de alto, en él figuran alrededor de 400 figuras - la mitad de ellas dotadas de movimiento- y está integrado por más de 2000 piezas. Representa la Natividad de Jesucristo, imágenes del Nuevo Testamento, y también - como la mayoría de los pesebres de Bohemia- la vida de los campesinos y artesanos checos.

El Nacimiento de Trebechovice goza del estatuto de Patrimonio Nacional. En el año 1967, el pesebre representó a la Checoslovaquia de entonces en la Exposición Universal celebrada en Canadá y el año pasado fue expuesto en el pabellón checo en la EXPO 2000, en Alemania, siempre con éxito.

Cabe agregar que para conocer la variedad y la singularidad de los pesebres fabricados en la República Checa, nada mejor que visitar el Museo de Pesebres de Trebechovice. Este dispone de una admirable variedad de nacimientos de papel, cristal, y otros materiales, incluido el famoso Nacimiento móvil que ya mencionamos. Y a estas alturas del año, la mayoría de los hogares checos tienen su Nacimiento.

Aquí finalizamos este programa especial de Radio Praga con motivo de la Navidad....

Que la paz, la tranquilidad y el amor, característicos para las fiestas navideñas en la República Checa, reine también en vuestros hogares....

¡FELICES FIESTAS DE NAVIDAD!