El pago del subsidio por enfermedad separa al Gobierno

Foto ilustrativa: Khalil Baalbaki, ČRo

Los ministros de la coalición gubernamental no hallaron consenso al debatir este lunes la posibilidad de volver a introducir el pago del subsidio por enfermedad a los trabajadores ya durante los tres primeros días de baja. El proyecto, impulsado por la Socialdemocracia, ha sido rechazado tanto por el democristiano Partido Popular como por el movimiento ANO.

Foto ilustrativa: Khalil Baalbaki,  ČRo
Hasta el año 2007 los trabajadores que quedaban de baja por enfermedad recibían un subsidio social que los primeros tres días de la dolencia correspondía al 25% de su salario normal, y posteriormente se incrementaba al 60%. A partir de 2008, dejaron de pagarse los tres primeros días en el marco de las medidas de austeridad, y también para impedir que se abusara de las ayudas. Efectivamente, desde entonces se redujo el número de trabajadores enfermos, según lo demuestran las estadísticas. Mientras que en 2007 se pagaron unos mil millones de euros en subsidios de enfermedad, en 2015 sólo unos 570 millones de euros.

No obstante, el Partido Socialdemócrata insiste en que es injusto que a los trabajadores enfermos les sea negado un subsidio por los tres primeros días de estar enfermos, y que el número de personas que abusan de esta ayuda es mínimo. Actualmente muchos empleados van a trabajar enfermos, porque no quieren perder dinero o temen quedarse sin trabajo, destacó Michaela Marksová, ministra de Trabajo y Asuntos Sociales.

Michaela Marksová Tominová,  foto: Filip Jandourek,  ČRo

”Las personas que trabajan y se enferman deberían tener el derecho a quedarse en casa y recibir una parte de su salario normal. Esas personas pagan impuestos y pagan también un seguro de enfermedad, por lo que deberíamos tomar esto en cuenta”.

El proyecto socialdemócrata cuenta con que las empresas pagarían a sus empleados el 60% del salario normal también los tres primeros días de enfermedad. Mientras que el tema figura entre las prioridades del Partido Socialdemócrata, los democristianos y el movimiento ANO rechazan recuperar la medida, argumentando que sería una gran pérdida para el presupuesto nacional, porque se reduciría también la carga impositiva a los empresarios, como indicó el ministro de Finanzas y líder de ANO, Andrej Babiš.

”Aprobar la medida significaría un gran impacto para el presupuesto nacional. La pérdida sería de unos 89 millones de euros anuales y eso realmente no nos lo podemos permitir ahora”.

El proyecto socialdemócrata es rechazado igualmente por los empresarios, que también afirman que las personas abusarían del sistema de ayudas de enfermedad, tal como sucedía en el pasado, según dijo a la Televisión Checa Vladimír Dlouhý, presidente de la Cámara Económica.

Vladimír Dlouhý,  foto: Jan Bartoněk,  ČRo
”Alrededor del 73% de los miembros de la Cámara Económica y, en general de los empresarios, no quieren volver al sistema de ayudas de enfermedad que regía antes del año 2008 y del que se abusaba. Por ello siguen rechazando tener que pagar a sus empleados los primeros tres días de enfermedad”.

En caso de que la Socialdemocracia logre imponer el proyecto en el Gobierno, se prevé que sea rechazado por el Parlamento. Por otro lado, los partidos de la coalición gubernamental, así como la oposición están dispuestos a debatir la posibilidad de aplicar los llamados sick days, o sea días por enfermedad. Se prevé que cada trabajador podría tener derecho a cinco días de ausencia en su centro laboral por motivos de enfermedad al año, durante los que cobraría su sueldo normal. Los analistas aseguran que este proyecto sí podría obtener el apoyo de ambas cámaras del Parlamento.